Otra vez sopa: es hora de salir de la pruebas PISA

Nota de opinión de María Lazzaro y Daniel Di Bártolo publicada en El Cronista Comercial.

17 de Marzo 2016

El Cronista Comercial

"Pésimos resultados de los alumnos argentinos en las pruebas PISA”, fue la sentencia reiterada de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDEP) al advertir sobre el Programa para la Evaluación Internacional de los Alumnos (PISA por sus siglas en inglés).

Según el informe, de los 64 países que aparecen, Perú, Colombia, Brasil y Argentina se encuentran entre los diez cuyos estudiantes tienen un nivel bajo en áreas como matemática, ciencia y lectura.

La disconformidad con PISA no solo la planteamos los docentes privados. En mayo de 2015, un grupo de intelectuales de diversas universidades, gran parte de ellas norteamericanas e inglesas, enviaron una carta abierta a Andreas Schleicher, coordinador internacional del sistema de evaluación.

Allí destacaban el papel negativo de las pruebas estandarizadas internacionales en promover la competencia en función de su rendimiento.

Además, algunos países pueden caer en la tentación y seguir caminos fáciles y de corto plazo para mejorar su desempeño, desconsiderando que los cambios en el campo educativo llevan mucho más que los tres años que separa una prueba de otra.

En tanto, en Latinoamérica, un grupo de especialistas en Brasil, nucleados en el Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales (CLACSO), expresaron su oposición al programa, destacando el carácter reduccionista, tecnocrático, economicista y privatizador de una prueba que contribuye con la precarización del trabajo docente y la despolitización de las prácticas educativas.

Salir de PISA no implicaría negar la validez de otras pruebas internacionales. De hecho, salir de PISA tampoco significa rechazar la participación en evaluaciones internacionales.
Por ejemplo, las pruebas del Laboratorio Latinoamericano de Evaluación de la Calidad de la Educación (LLECE), coordinado por la oficina regional de la UNESCO en América Latina, constituyen un aporte de mayor relevancia para un conocimiento riguroso de la calidad educativa.

Nuestras argumentaciones de ningún modo soslayan y disminuyen el valor objetivo de la evaluación en el proceso pedagógico y en las políticas públicas de educación. Más aún, como consecuencia del Acuerdo Paritario del 29/10/2013 y la instrumentación del Programa ‘Nuestra Escuela’, en el que SADOP participó activamente, acuñamos un sentido, un itinerario y una metodología propia: auto-evaluación institucional, participativa y situada.

En el inicio de año escolar, la difusión sesgada de los resultados PISA no hizo más que enturbiar el proceso de negociación colectiva de los docentes, tratando de deslegitimar el reclamo salarial.

Evaluar calidad integral de la educación implica una mirada amplia y estructural de un proceso complejo, algo que está en las antípodas de solo medir en un múltiple choice algunos ítems de saberes, de algunos alumnos, de una edad, de algunos colegios.


María Lazzaro
Secretaria General Adjunta
SADOP- CDN

Daniel Di Bártolo
Secretario de Educación
SADOP- CDN

Notas Relacionadas